22 feb 2021

La generación milenial, la que más ingresos pierde con la pandemia.

 La generación milenial, la que más ingresos pierde con la pandemia

El 66% de los que tienen entre 24 y 39 años asegura percibir menos salario por la crisis de la covid y el 49% ha visto reducida su jornada laboral, según una encuesta de 40dB.

La factura de la pandemia en los jóvenes ya puede medirse. Los mileniales ―mayoritariamente, conocidos por el término en inglés millennials―, los que ahora tienen entre 24 y 39 años, son la generación que más ha sufrido una reducción de ingresos, la que más horas de trabajo ha visto recortadas y la que en mayor medida ha tenido que reducir su gasto desde marzo de 2020. Así se desprende del informe El impacto generacional del coronavirus, un sondeo que se presenta este lunes para el que la agencia demoscópica 40dB ha encuestado a mil personas entre 16 y 75 años para conocer en profundidad los estragos económicos y emocionales que la crisis sanitaria ha dejado en sus vidas. “La pandemia ha acentuado la tendencia que ya veníamos viendo desde la debacle de 2008; una vez más son estos jóvenes los grandes perdedores de este clima político”, sostiene Stephan Zao, analista de 40dB.

Con una tasa de paro juvenil del 40,9%, el 66% de los mileniales encuestados asegura que ha visto reducido su salario, un porcentaje que en el caso de la llamada Generación Z —los que tienen entre 16 y 23 años— baja al 60% y en el de la Generación X —los que tienen entre 40 y 54 años— al 50%, señala el informe, que forma parte del proyecto Genera, impulsado por la Fundación Felipe González y la Fundación de Estudios Progresistas Europeos para reducir la brecha entre generaciones. Los mileniales son además los que más han visto reducida su jornada laboral (un 48,9% de ellos así lo asegura, frente a un 36,8% de la población general) y los más afectados por la pérdida de empleo (un 8,5% frente al 5,1% de la población general).

El pesimismo es una de las sensaciones compartidas por las diferentes generaciones, señala el estudio. Un 63,9% de la población general asegura sentirse más desanimada a raíz de la pandemia, aunque en este caso son los jóvenes de la Generación Z los más afectados: un 78,3% frente al 65,9% de mileniales.

Mayores medidas” de protección social que en 2008

Un 51, 6% de los mil encuestados por 40dB. se mostraron “muy de acuerdo” con la afirmación que planteaba que “comparado con la crisis de 2008, en esta ocasión se han puesto en marcha mayores medidas de protección social”. En cambio, un 74,1% no se mostró de acuerdo con que “el Gobierno está protegiendo a los jóvenes de la crisis generada por el coronavirus”. Una cuestión en la que la Unión Europea salió menos perjudicada: el 67,5% de los encuestados entre 16 y 75 años consideró que las políticas europeas no están a la altura de las necesidades de los colectivos de menor edad. Sin embargo, las medidas sociales implementadas por el Gobierno (como los ERTE o el Ingreso Mínimo Vital) recibieron una puntuación media de 8 sobre 10.


15 feb 2021

 ENTREVISTA A MARTA PEIRANO

"El 5G es una gran trampa para espiarnos, nos están engañando a todos"

Marta Peirano es una de las voces más respetadas en nuestro país sobre privacidad y seguridad en internet. Ahora publica el libro "El enemigo conoce el sistema". Hablamos con ella.

Marta Peirano se queda congelada mirando la pantalla apagada de su móvil. Por unos segundos ha entrado como en shock. "Me acabo de dar cuenta que esta mañana quité las pegatinas de las cámaras y no las he vuelto a poner". Peirano, periodista, escritora y una de las voces más respetadas en nuestro país sobre privacidad y seguridad en internet, no da un paso sin las cámaras de su móvil y portátil totalmente cubiertas. No es paranoia ni postureo. 'Hackear' hoy en día el micro o la cámara de un 'smartphone' es cosa de niños. Lo hizo hasta la LaLiga. Para ella, colega de Snowden y una de las mayores críticas del millonario negocio que han montado Facebook, Google o Amazon a costa de nuestros datos, proteger la privacidad es lo último que nos queda. Y ya ni eso. "Con el 5G, despídete".

PREGUNTA. Su definición de internet desasosiega. Asegura que se ha convertido en una herramienta de manipulación de masas. ¿Por qué? 

RESPUESTA. Internet está dominado por un modelo económico basado en la extracción de datos para la manipulación de personas con el fin de venderles objetos, servicios, experiencias, candidatos políticos... Y está en manos de cada vez menos empresas que pelean entre ellas a muerte por dominar ese mercado. Los gobiernos de hecho son clientes de esas compañías y usan sus infraestructuras para controlar a la población, producir 'fake news' o perseguir a disidentes.

P. Hay mucha controversia sobre si realmente existe o no la adicción a internet. ¿Cómo puedo saber si estoy enganchado? 

R. No creo que exista la adicción a internet sino a las aplicaciones, a WhatsApp, Instagram o Twitter. Están diseñadas para que sientas que están pasando cosas ahí y que tú necesitas estar pendiente porque si te quedas fuera te quedas fuera para siempre. Están creadas para que tengas miedo a quedarte atrás. Entras el metro y está todo el mundo pegado a su pantalla. Si eliminas al 32% de quienes están jugando al Candy Crush, que también está diseñado para ser adictivo, la mayor parte de la gente está en su Facebook, en su Instagram etc. 

P. ¿Qué hay de malo en eso? Igual se están informando, leyendo, están aprendiendo cosas nuevas. ¿En qué punto pasa a ser eso un problema? R. Cuando no sabes hacer otra cosa. Yo estoy suscrita a una revista de papel, hace unos años me la leía del tirón, ahora la leo y estoy todo el rato deteniéndome para mirar cosas en el móvil. Y eso que hablamos de una revista de papel. Como estés leyendo online, olvídate. La gran mentira es que pensamos que somos adictos al contenido, a la información de fútbol, cocina, economía, tecnología... lo que sea. La realidad es que somos adictos a la aplicación. 

P. Oficialmente no está reconocido ni demostrado que exista adicción a internet o a las aplicaciones. No se ha incluido en la 'biblia' de las adicciones, el Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders (DSM-5) y, además, todo indica que quienes sufren casos de extrema dependencia de internet o de las 'apps' es porque es manifestación de trastornos ya existentes como ansiedad o depresión. ¿Estamos culpando a la tecnología cuando el problema lo tenemos nosotros? 

R. Las estadísticas de los últimos años sobre depresión adolescente vinculada con el uso de redes sociales son contundentes, hay una relación altísima. Hay países como Reino Unido donde se ha creado un ministerio de la soledad. El mismo proceso de segmentación en el que tú prefieres encontrarte online con gente que solo comparte tus mismos gustos, que te valida como persona, genera que en cuanto sales de ese entorno y no hay gente que te valide todo el rato, te vas aislando cada vez más porque no te hacen sentir cómoda. 

P. ¿No cree que eso le ocurre a una minoría de la población y que es por la existencia de problemas psicológicos previos que la tecnología solo amplifica? 

R. No, no estoy de acuerdo. ¿Has estado últimamente en una fiesta de cumpleaños de adolescentes? Te encuentras con que están todos sentados mirando su móvil. Se lo están pasando guay, pero están todos con su móvil, algunos de ellos hablando con otros que tienen al lado, pero a través del móvil. Ellos identifican que se lo están pasando bien, pero no es lo mismo estar entretenido que estar comunicándote. Creo que ese tipo de relación social hará que no tengan los vínculos donde los necesitan, que es en su entorno, en su proximidad. 

P. Nuestra capacidad de atención en el 2000 era de 12 segundos. Ahora es de ocho, menos que un pez de colores. ¿Es este el verdadero problema que ha traído internet? 

R. Creo que es un síntoma. La clave de todo esto es que somos vulnerables a determinado tipo de estímulos y hay una industria que contrata a genios para explotar esa vulnerabilidad. Y ha pasado tan deprisa y ha sido tan guay que hemos sido incapaces de evaluar el daño que nos está haciendo. Todo esto nos ha hecho darnos cuenta que, uno, no somos multitarea y dos, y más importante, esta dependencia nos hace infelices. Lo que hemos aprendido de múltiples estudios psiquiátricos y psicológicos en la última década es que estar constantemente interactuando con un dispositivo, por mucha satisfacción que te genere a corto plazo, en realidad te produce una gran infelicidad. Te desconecta de la gente. Conduce a un estado de soledad, te aísla de las personas. 


8 feb 2021

Una reforma integral de la FP

 Celaá acomete una reforma integral de la FP con los fondos europeos

Educación revela a las autonomías parte del Plan de Recuperación enviado a Bruselas, con una inversión de casi 5.000 millones en tres años y novedades como la Formación Profesional bilingüe.

España tiene la tasa de paro más elevada del Atlántico Norte, y las cifras de precariedad laboral más feas en ese club de países ricos que se hace llamar OCDE. El mercado de trabajo es el gran talón de Aquiles de la economía española, y su reforma es una de las grandes batallas políticas de los próximos tiempos. Pero este no es un artículo más sobre la reforma laboral, porque tal vez la raíz del problema no sea el mercado de trabajo, sino la educación.

Tras poner en marcha la ley de educación el pasado diciembre, la ministra Isabel Celaá ha comunicado este viernes a las autonomías esa inyección de fondos, que se llevará a cabo con las comunidades mediante programas de cooperación territorial. Aparecen así los primeros contornos del plan de recuperación español, guardado bajo siete llaves por el Ministerio de Economía porque está aún negociándose con Bruselas.

En Educación, que capitaliza tres de los 30 componentes, la modernización de la FP se lleva la parte del león, con 1.900 millones de euros. Celaá tiene en la cabeza esa reforma desde que puso el pie en el ministerio: el presidente Pedro Sánchez presentó en julio de 2020 un plan para reformar la FP, pero los fondos europeos permiten elevar la inversión prevista casi el 30%, con novedades de calado como la introducción de la FP bilingüe.

1. FORMACIÓN PROFESIONAL. 

Educación modificará varios reales decretos, reformará el sistema de convalidación de títulos de FP y renovará 60 titulaciones en sectores estratégicos, desde la robótica y los equipos aeronáuticos a la biofarmacia, muy centradas en el doble foco del Plan de Recuperación: las agendas verde y digital. El ministerio invertirá 725 millones en tres años en reconocer y acreditar las competencias profesionales de algo más de tres millones de personas. Convertirá uno de cada 10 ciclos formativos en bilingüe con una inyección de 520 millones.

España está lejos de esos números: alrededor de la mitad de los cuatro millones de parados que hay ahora en España no ha terminado la educación secundaria.

2. CAPACIDADES DIGITALES.

Educación protagonizará la “transición dual”, digital y verde, con la vista puesta en la digitalización del sistema educativo hasta la universidad, el cierre de la brecha de género (los datos revelan que, tras tener un hijo, una parte importante de las mujeres trabajadoras reducen sus jornadas laborales o abandonan sus carreras, algo que se traduce en una caída de la participación laboral de en torno al 9% respecto a los varones) y el impulso de la formación en zonas en declive demográfico.

3. SISTEMA EDUCATIVO Y DESIGUALDAD. 

Educación subraya que persisten algunos elementos estructurales “que impiden avanzar con un mayor ritmo en la reducción del abandono temprano de la educación y en la mejora de los resultados educativos”. Las cifras son lacerantes: España tiene tasas de abandono escolar temprano en torno al 16%, con la media europea por debajo del 10%.

FP Euskadi.


4 feb 2021

¿Cuál es el mayor problema del sistema educativo?

 La repetición de curso, la barrera del título de la ESO y el abandono. 

El primer reto es que todo el alumnado alcance el éxito educativo en la educación obligatoria. Y no identifico éxito educativo exactamente con el título de la ESO, sino con el dominio de las competencias establecidas. El segundo reto es que todo el alumnado pueda continuar formándose hasta los 18 años, por las vías formativas que una buena orientación sugiera, y obtenga al final de esta secundaria las cualificaciones correspondientes, académicas o profesionales, que le habiliten para la educación superior o, en su caso, para la incorporación al mundo laboral con, al menos, una cualificación profesional de primer grado.

El presidente el Consejo Escolar de Estado: “En los países de éxito los alumnos no repiten cursos, sino aprendizajes”

“No es preciso que los alumnos dominen listados inabarcables de contenidos en cada materia. Ese planteamiento está muy instalado en cierta cultura española”, afirma Enrique Roca, que dejará el cargo en unos días-

¿Qué opina de la nueva ley de educación?

(..) da pasos decisivos en la dirección marcada para este siglo por instituciones internacionales como la UE, Naciones Unidas y la OCDE, orientados a la equidad, la educación en un mundo global, la preocupación por el medio ambiente, el respeto a las diferencias y el derecho de todos los niños y jóvenes a la educación.

¿la repetición debiliten la cultura del esfuerzo?

Hay que repetir aprendizajes, no repetir cursos. Eso es lo que ocurre en los países de éxito que hemos estudiado en el consejo. El esfuerzo lo tiene que hacer todo el sistema educativo, no solo el alumnado. Para garantizar el trabajo en equipo y en clase, para que los centros puedan poner a disposición del profesorado los recursos y los métodos organizativos adecuados.



2 feb 2021

Bajar la curva de repetidores

El gran reto de la ‘ley Celaá’: bajar la curva de repetidores

El 29% de los alumnos se ve obligado a estudiar un mismo curso. La nueva norma educativa busca reducir una práctica que los expertos consideran cara e ineficaz.

La repetición, un recurso pedagógico controvertido que la nueva ley educativa pretende limitar, está muy arraigada en España. El 28,7% de los alumnos de 15 años ha repetido al menos una vez, frente al 11,3% de la media de países de la OCDE, según datos del último informe PISA, de 2018. La organización internacional lleva décadas instando a reducir su uso, al considerarlo caro —en España cuesta 3.000 millones al año solo en la ESO— y, sobre todo, ineficaz. España también lidera la tasa de abandono escolar temprano (la población de 18 a 24 años que tiene como máximo el título de secundaria y no sigue ningún tipo de formación que le permita elevar su cualificación) en la UE, con un 16%, frente al 10% de promedio comunitario.

La ley Celaá ha introducido cambios para intentar doblegar la estadística a mayor velocidad. De 2012 a 2018 el porcentaje de repetidores disminuyó en España cuatro puntos, mientras en otros países con tradición en la materia, como Portugal, se redujo nueve puntos en el mismo periodo y en Francia, 12.

La nueva norma limita a dos el número de veces que puede repetir un estudiante en toda la etapa de enseñanza obligatoria (hasta ahora eran tres). Y desvincula la promoción del hecho de haber superado un número concreto de materias, dejando la decisión en el equipo docente y reduciendo la repetición solo a aquellos casos en que los profesores lleguen a la conclusión de que beneficiará su trayectoria académica. La ley sienta, además, las bases de una gran revisión del currículo (los contenidos que estudian los alumnos y la forma de evaluarlos), y restablece los programas de diversificación curricular (que adapta las materias para los estudiantes que van mal, haciéndolas más sencillas).

La apelación a la cultura del esfuerzo, cree, por su parte, José Saturnino Martínez, puede conducir “a la trampa de dejar caer toda la responsabilidad en la voluntad del estudiante, de forma que las instituciones y el profesorado se puedan lavar las manos”. “Y”, continúa Martínez, “ocultar que muchas veces no se utiliza tanto como una herramienta educativa sino castigadora o como una forma de chantaje. En vez de hacer una mejor didáctica se le dice al alumno: ‘Si te portas mal, vas a perder un año de tu vida”.

Las estudiantes suspenden curso en menor proporción que los chicos y Gipuzkoa es el territorio con más éxito académico en Euskadi